jueves, 20 de marzo de 2014

Cerrado.



Aún me veo reflejada en ese escaparate.
y es que a veces
nos encontramos cosas cerradas
y lo peor es sentir que nunca van a estar abiertas.

( Juguetes de pega, sustituyendo caricias y aliento)

Noches en vela y cartón piedra por almohada.
Incomprensión gratuita sin preguntas.
¿Y a quién culpar?
Sólo queda imaginar calor  a extraños sin corazón
y un nudo en el pecho con cuerda de mimbre.
Ya no llevo coletas,
ya no juego al escondite,
que has crecido
pero aún sientes frío...
Te pueden querer sin que ese amor te sirva,
sin alimentarte de él
e intuyendo la posibilidad
de un abrazo que abrigue.

No todo fue malo,
sólo mal aplicado.

Sin culpas
pero con dolor y pérdida...
pérdida de amor propio
y algo de hielo hacia quien
casi siempre me dio invierno y negación.

Y aún así querer, comprender
y no actuar igual.
Valor de última fila
para hacer tiritas de duración indeterminada
y un lugar tierno
donde devolver cariño por espinas.

( Son mas fuertes las espinas del buen hacer que el odio)

A veces.

martes, 11 de marzo de 2014

Entre dos.



(Leer con Extremoduro de fondo lo mejora todo.)

 Un mano a mano entre @ y yo. Impares obra suya, los pares, míos.


Y la muerte vestida de seda y andando sobre tacones y besando con ojos carmín.

Y con el azul desvaído de la ropa en el suelo después de su cenit.

Arrancando sonrisas y provocando catástrofes con las manos limpias.

 Y luego beber el verbo de su boca caliente, tejiendo universos.

Aplicando el infinito a sus cortas vidas, haciéndoles creer que mereció la pena.

Enjaulando la duda, comiendo pasteles de azúcar ambiguo. Imágenes de costuras aún húmedas.

 Soñando con plumas coloreadas por la experiencia, telas de hojas rojas volando sobre sus cabezas.

 Y volando en tierra con las sonrisas llenas y el suelo crujiente tras el otoño.

 Corriendo sobre ríos sin agua, en busca de alimentos con los que nutrir su alma.

 Vomitando ácido tras ingerir pureza, más sol al norte de nunca.

 Espiando pecados ajenos para salvar vidas propias ya manchadas por la corrosión.

 Cobre destiñendo verde en las comisuras de lo imposible, un ladrido de menos a la estrella muerta.

 Óxido olvidado por las manos de la experiencia niños nacidos ya condenados.

 Amamantar yermos sueños mientras lloran hambre ante la decadencia.

 Criar guerreros destinados al fracaso,  caballos desbocados con sed de sangre.

 Y inútil cita de malla para pechos ciegos, lenguas de fuego pariendo soledad destinada a herida.

 Vendas cubriendo los ojos ciegos de ira, manos asestando heridas rotas.

 Inercia de combate hacia guerras sin meta, la umbría podredumbre del valor malgastado.

  Fuerzas extrañas, cercanas al malestar horizontes perdidos buscando ojos en los que vivir.

  Paraísos de gomaespuma y champagne de verde reflejo... huir al caos más  humano que la estructura.

 Hogares construidos sobre cementerios, hogueras sin llamas a las que quemar.

 Frío sin nombre entre las faldas de la propiedad fingida, andar de puntillas en platos de cuchillo.

Manos intentando robar lo que les pertenece, piernas dejandose abrir por la persuasión de bocas histéricas.

 Pactos de sexo negando historias al amor cada vez más  sólo. Gritos sin orgasmos ante mundos sin almas.

Balas sin pistolas a las que querer el campo se muere si no lo miras.

 Correr con las ganas de conseguir alguna flor entre los golpes del vacío.Amor de luna rota que acune.

  Noches que arropan los ejércitos desolados, bosques que encarnan espíritus malogrados.

 Para comer ingrato guiso de esperanza marchita, ramas tendidas de escarcha y ropa sucia.

 Cubos espetando llenar bañeras, arroz quemado de tanto andar, niñas gritando esperanza entre tantos locos.

Porque la niñez se rompió antes de tiempo y el arroz requemado les hizo muro en la inocencia.

Sus ojos maduraron antes que su cuerpo, madres antes de tiempo cambiando el futuro.

Y la tristeza que habrán de cambiar por enseñar a sus hijos nuevas palabras y caminos sin andar.

Enseñarles que los dioses murieron el día que la tierra se abrió al cielo.

Que lo único a seguir sea su hambre de volver a hacer justicia,buscar en las tripas del mundo un lugar que ganar.

Cargar las espadas de valor y volar hacia la libre victoria.

Y que no sólo haya sido un sueño.No hay banderas, no hay miedo...

Hay realidad que será vencida con lanzas y hechos profundos.

Cantando con furia nuestra pelea y sin hincar la rodilla al miedo.

 Haciéndole frente al frío invierno,  encarcelado los rayos del sol para no perder la cabeza.

 Abrirle las yemas a la primavera y nombrar los cuerpos que el calor destila.

domingo, 2 de marzo de 2014

Los dientes siempre fuera.


Y soy pecadora y débil  y una puta de gustos caros en lo que a sentimientos se refiere.
Y ni me arrepiento ni voy a cambiar
porque a vosotros os parezca mal.
Si tengo que llorar lloro,si tengo que chupar chupo
y me paso por el balcón del escote
vuestras babas de hipócritas
con vuestras barajas de doble moral 
y vuestro rasero inmoral
de pretensiones ciegas y correosas.

Que a mi las miradas nunca me salen gratis,
más de una vez me ido sin lo puesto
y con un valle de heridas manejando mi latir.
No soy fácil ni lo quiero ser,
mi remedio está en calles lúbricas y amaneceres de cuchara,
donde quede algo que sentir,
donde pueda masticar a gusto mi cansada bondad perversa.

Os podéis reír, cansar o gastar saliva...
mi nombre ya no sirve
y a las manos que consuelo
ya se les desprende la carne...
de tanto barlovento salado
y tanta palabrería con sabor a nunca digo nada.
Tanto amor propio a los halagos que os condenan
y yo aún llorando mierda
en los portales de mi confianza y mi traición.
Pero sé que soy y que mi mala sangre
supera a mis alas de ángel...

Si sabes acercarte de frente
puede ser que salga el jugo de estrellas
y no la muerte que me llena las bragas.
Al final, todo depende
de que tus manos sueñen o solo vendan.

Soy un cara o cruz
de maniacas intenciones
y un mar que cambia tanto
como lo hace mi sonrisa y mi agonía.

Tanto y a la vez tan poco.